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FR. BUENAVENTURA DE CARROCERA, O. F. M. CAP. del mencionado río y que para evitar el comercio clandestino, deseando por otra parte poner allí una o más poblaciones de españoles, «comencé -escri, be- a mover los ánimos para que pasasen a poblarse, ofreciéndoles el repar, timiento de las fértiles tierras y demás privilegios que conceden las leyes a los nuevos pobladores, de que ha resultado que varios de los que intentan poblarse, han ido al reconocimiento de dichas tierras y asegurados de lo dila, tado y fértil de ellas así para ganados como para plantages de caña y cacao, se han aficionado y al presente se hallan alistados cuarenta familias de los avecindados en esta ciudad, en la de Barcelona y sus llanos y otras muchas en espectación de los progresos para, según ellos, pasar a poblarse. Tengo nom, brado ya capitán poblador y sólo se espera pase yo a aprobar el sitio en que se ha pensado fundar la nueva ciudad, que es en el del Maturín donde la em, prendió Tornera, lo que ejecutaré luego que me lo permitan mis muchas ocu, paciones, no dudando del buen efecto, pues ya hoy no se ofrece el menor temor de que los indios lo embaracen, pues todos los pueblos allí inmediatos están ya, aunque en misión, bien educados y en términos de formalizarse en doctrinas. Lograda dicha ciudad que se intenta, no es dudable que se empren, derán otras poblaciones, pues los terrenos convidan como los más fértiles)) 56 • Del contenido de este informe de Diguja se sigue manifiestamente que Tornera emprendió establecer la ciudad de Maturín pero que «no tuvo efec, to)) : que él pensaba también fundar o poblar esa nueva ciudad y que había de ser en el sitio de Maturín «donde la emprendió Tornera)): luego es señal de que no estaba fundada en manera alguna anteriormente y que lo hecho por Tornera no pasó de mero proyecto. ¿Llevó Diguja a cabo sus planes, fundando esa ciudad en las fértiles ribe, ras del Guarapiche? A pesar de sus buenos deseos es un hecho que no pasó de eso que él asegura en el citado informe, quizás por dificultades surgidas y, lo que parece más probable y casi seguro, por sus muchas ocupaciones, ya que no sólo tenía a su cargo el gobierno de aquellas provincias sino que además formaba parte de la Comisión de Límites. A ello debe añadirse que no tuvo tampoco tiempo para ejecutar sus planes, puesto que el 20 de septiembre de 1764 le fué nombrado un sucesor en el gobierno y él escribía el informe a Arriaga el 15 de diciembre de 1763 57 • Ese sucesor de Diguja fué D. Pedro José de Urrutia 58 , uno de los gober, nadares que más se interesaron por la prosperidad de aquellas provincias, de 56 Expediente sobre la traslación..., ff. 82v.,84. 57 Quizás estos informes de Diguja sean un tanto exagerados. D. Luis de Chaves y Mendoza así lo dice al menos por lo que respecta a los padrones de los pueblos hechos por él en su visita. Cfr. Consejo de Indias (29 de agosto de 1790) (AGI, Caracas, Le, gajo 20). 58 Fué nombrado por Cédula Real del 20 de septiembre de 1764 (AGS, Dir. gen. del Tesoro, Inv. 14, Leg. 184, n. 0 765). - 22 -