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- Mujer, mira a tu hijo. Luego dijo al discípulo: Ahí tienes a tu madre. Y desde aquella hora la acogió el discípulo en su casa". El sentido literal del pasaje está claro: Jesús señala a Juan como hijo de María y. desde aquella hora. la acoge en su casa. la toma consigo como cosa propia y la cuida con la reveren– cia, el respeto y el afecto que merece tal Madre. No es como si fuera su madre. Es que es su madre con todo el rigor de la expresión en la familia nueva que funda el Redentor en la cruz. María ha engendrado a Juan entre las lágrimas. la angus– tia y la compasión amorosa viendo al Hijo morir y teniéndo– le luego en sus brazos. El fíat de María es un ·•sí" dinámico y creativo de integra– ción en el destino salvador. de plena disponibilidad al servi– cio de la causa de Jesús y tiene "momentos fuertes" de conte– nido maternal, como son el Nacimiento en el pesebre y el derramamiento de la sangre en la Cruz. En ambos momentos. el papel maternal de María cobra una especial intensidad. Los personajes de esta historia sagrada son María y Juan. Sin embargo. el sentir cristiano expresado por los pensa– dores y, de modo particular por la tradición y las más profun– das convicciones del pueblo, ha visto en Juan el ·'prototipo'', la figura y el símbolo del '•grupo" que sigue a Jesús, de cada uno de los discípulos amados que creen en Él, que lo esperan todo de Él y que lo aman apasionadamente. Juan sería la per– sonificación al vivo del grupo, del creyente, del seguidor de Jesús. Y en este seguimiento está incluida al menos virtual– mente toda la humanidad. La maternidad integral de María abarca a todos los hom– bres. sin distinción de raza ni color, en todos los tiempos y espacios de la historia. BREVIARIO DE PSICOLOGÍA MATERNAL Nos hallamos en el mundo misterioso de la madre. que rompe todos los moldes y crea un nuevo y original lenguaje 269
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