BCCCAP00000000000000000000338

María es dócil a las inspiraciones del Espíritu Santo. que la informa. la forma. la transforma. la santifica y la '>ienla a la mesa de su comunión divina. María. indiscutible princesa de virtudes. 5-.e convierte en virtud de esta comunión con el Espí– ritu Santo. en disfrutadora y di~pensadora de sus "'dones". El esfuerzo de la virtud es ya "cuidado entre las azucenas olvi– dado". A la navecilla del alma no le hacen falta ya los esfor– zados y sw.lornsos remeros: le han nacido alas blancas de velero y el viento y las brisas del Señor la llevan a buen puer– to... Nos arrodillarnos amorosamente ante el misterio de la Encarnaci;on con una confesi;on de fe que nos ha sido trans– mitida de generación en generación: "y se encarnó por obra y gracia del Espíritu Santo en el vientre de María virgen". María es la madre carnal de Jesús. \erdadero Dios y \erdade– ro hombre. Del Espíritu Santo y de María. madre virginal. nacemos los hermanos de Jesús. María e:,, la madre espiritual de e~ta familia nueva que no se engendra por obra de varón ~ino por voluntad de mi:,,ericordio:,,o amor. María es la madre de esta familia numerosa como las estrellas del cielo y la:,, are– nas del mar. que es una prolongación en el tiempo y en la his– toria de la existencia corporal mística de Jesús. Cuenta una bella tradición que las lenguas de fuego de Pentecostés se posaron primero sobre la cabeza de María y que ella las fue ·•distribuyendo'' una por una entre todo:,, los del grupo. Algo así como el fuego nuevo de la Vigilia Pascual con que se enciende el ·•cirio .. de Jesús -luz del mundo- y que Él reparte encendiendo una por una las velas de la reunión litúrgica. En rigor. la mediación de María :,,e abre a horizon– tes de universalidad en todo el ámbito de la gracia. El Espíritu Santo infunde en María lodos sus dones y carismas y la llena hasta rebosar de luces y lumbres el pensa– miento y el corazón. En el repartimiento de los dones y caris– mas. cada uno tiene un papel y una misión que cumplir en el Colegio apostólico y en la comunidad eclesial. Es fapíritu Santo es Amor infinito y el hombre con sus limitaciones no es capaz de asimilar más que pequeñas parcelas de esta inmen- 2-1-3