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generación- ha formado almas de temple, familias ejempla– res, hombres y mujeres cristianos a carta cabal. La Virgen ha configurado su sentido cristiano ele la vicia, su mentalidad, su historia personal y familiar. La veneración y el culto a María se ha inspirado siempre en el Evangelio y en las directrices de la Iglesia sin el menor atisbo de rebelión o reticencia. El pue– blo español, noble y sencillo, ha sido gente de Rosario, de Avemarías, de Salves y de hermosas oraciones a la Virgen María. Eso sí. lo ha hecho en clave de enamoramiento: can– tando. La devoción popular no es tesis ele cátedra ni raciocinio filosófico. Es dinámica, llena de pujanza y ele vitalidad. Es una devoción de vida y para la vida, en un ambiente de liber– tad y de confianza que pone el corazón al rojo vivo. Y en este clima de apasionamiento se desborda el corazón y dice a la Virgen las cosas más bellas y verdaderas en el lenguaje uni– versal del canto. En este ambiente contagioso, el teólogo más disciplinado rompe a cantar. .. Jean Guitton ha escrito páginas bellísimas sobre el fenó– meno del lengmtje mariano, con finas anotaciones psicológi– cas. En su opinión, es un "inconveniente" en algunos libros que tratan ele la Virgen María el "hecho" de que "van más allá de toda medida". Y prosigue sus reflexiones con este texto de antología: "Por otra parte, no hay que sorprenderse demasiado por el lo. El exceso en la expresión es el signo de l amor. Y el mundo de la Virgen en la Iglesia católica, tal como la conocemos, es el enclave reservado a la ternura humana y divina, jardín secreto, fuente sellada, "bortus conclu– sus", " fons signatus", como dice el Cantar de los Canta– res, aunque allí no baya nada oculto a las miradas. Pero así como en toda comunidad. sea familiar. nacional o de partido, hay, además de lo públ ico y manifiesto. movi– mientos reservados. consignas y sonrisas que, sin ser secretas. no las comprenden más que los verdaderos miembros, así también ocurre en la Iglesia, que es una especie de familia. El culto de la Virgen pertenece a este sector íntimo y necesario de toda vida..." Nos encontramos en el mundo maravilloso del amor. El 21