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ENFERMERAS MISIONERAS A TODO RIESGO Los indios enfermos de esta cina» que los Yucpas aplican medo, propio de este trópico Sierra de Perijá, que habitan a sus enfermos. que nos deshace hasta los en sus miserables ranchos di- Los indígenas que han fre- huesos. Una nube que presa– seminados por las crestas de cuentado la Misión y se han gia tormenta se cierne sobre los picachos inaccesibles, aco- beneficiado de la asistencia la montaña vecina a nuestro sados por enfermedades a del Dispensario y de las me- Centro Misional. Una india veces terribles y dolorosas, se dicinas que les proporciona, llamada «Aschokrepa» (la– ven obligados a sufrirlas, a no les importa · el recorrer drona) -especialista en robar soportarlas, muchas veces a grandes distancias, a veces gallinas y retorcerlas el cuello– morir, sin un pobre alivio y durante días enteros, para llama a la puerta de las Her– sin el mínimo consuelo. llegar a la Misión en busca manas Misioneras. de Santa Sus familiares, apenados, de los remedios para sus en- Ana. se conforman con mirar al fermedades o a que les atien- -«Nopancha... » (¿Qué enfermo. Jamás se les ocurre da la Hermana Enfermera en buscar el modo de mitigar sus el Dispensario. penas y sus angustias. En muchas ocasiones les «obli– gan» a morir, porque les fuer– zan a tomar su bebida em– briagante llamada «chicha», que aun a los sanos les oca– siona frecuentemente graves «KUTUTA» TENER MUCHAS ESPINAS EN EL CORAZON quieres?) -le pregunta la Hermana que atiende a su llamada. -«Obaspiaya» (remedio para el dolor). «Kukuta» (nombre del enfermo) «apsip– tohía obatruru», (muchas es– pinas en el corazón). perjuicios y grandes trastor- Jueves, 17 de julio de 1952. Mientras la Hermana trata nos. Esta es la única «medi- Día de calor sofocante y hú- de informarse y atenderla, la 193