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ción franciscana, con todos aquéllos que colaboran con nosotros o pertenecen a nuestra familia espiritual. En particular los hermanos cumplan debidamente los deberes de piedad y familiaridad con los padres, parientes y bienhechores, acordándonos de todos ellos en la oración, sobre todo comunitaria 46 • Si en el pasado la asistencia a laOrden Franciscana Seglarpodía considerarse como una de nuestras formas de apostolado, después del capítulo general de 1982, con éstas Constituciones, se establece que los Superiores deben favorecer "una verdadera reciprocidad vital entre las fraternidades de nuestra Orden y las de la Orden Seglar" 47 y que los hermanos pongan gran empeño en "manifestar a los miembros de la Orden Seglar un sentimiento verdaderamente fraterno" 48 • La OFS, "como parte necesaria para la plenitud del carisma franciscano" 49 , debe ser considerada una comunidad de hermanos que colaboran con los religiosos promoviendo la llegada del reino de Dios, viviendo en su estado de laicos la vida evangé– lica, compartiendo y promoviendo el genuino espíritu de san Francisco. Para alcanzar la perfección de la caridad en su estado de vida, hay que asegurarles una "continua y esmerada asistencia espiritual y pastoral, sobre todo, por medio de hermanos idóneos debidamente preparados para este ministerio" 50 • Idéntiéa invitación se dirige a los hermanos para que promuevan y ayuden "espiritualmente todas las asociaciones, en especial de jóvenes, que cultivan el espíritu de san Francisco. Conviértanse nuestras casas en centros de encuentro y de animación fraternos para cuantos, clérigos y seglares, quieren seguir las huellas de Cristo guiados por san Francisco" 51 • Toda fraternidad capuchina debe ser centro que irradie nuestro propio carisma franciscano, que invite a los demás a seguir las huellas de Cristo según nuestro 46 Cfr Const 94. 47 Const 95,5. 48 Const 95,4. 49 Const 95,1. 50 Const 95,1-7. 51 Const 95,9. 97