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ANSELMO DE LEGARDA el poco advertid o engaño con que Violant e querí a ser reina , en ofensa mía, de Navarra , ¡caso extraño ! No permiti ó el justo Cielo tan grand e ofensa en mi honor , pues su mismo embajado r me avis ó de su ma l celo . Amaba al conde de Urge l de suert e que se alabab a que sus favore s gozab a poco amant e y poco fiel. Mandól e mata r y luego , con indign o atrevimiento , intent ó mi casamiento . ¡Vano error , intent o ciego ! Corrid o estoy , ¡vive Dios ! en el grado que ofendido . Dejábamo s al conde de Urge l en la choza del villano Sancho . Lo volvemo s a ver medi o restablecido , apoyad o en su espada (28b) . Le llaman Ramiro . Dialog a con Sancho (30b) : -Conozc o mi obligación : la vida os debo . -N o a mí, Ramiro , sino a la Infant a de Navarra . ¿Qué os espanta ? -¿A la Infanta , Sancho ? -Sí ¿Qué os encoge ? -Habla d con tiento , por Dios . -E l pecho ensanchad , que en Blanca esta volunta d tiene mayo r fundamento . Aunqu e aquell a sortij a le impon e a Sancho riguros o silencio , se decid e a descubrirl e al herido toda la verdad . Sancho está cierto de que la Infant a sinti ó un gran amor por el herido : Ramiro , yo vi en sus labio s sangre de tu misma cara. Presum e el villano que la Infant a ha vuelt o a salir a caza. Se retir a el cond e de Urge l y al punt o aparec e la Infant a con la muje r de Sancho que le va informand o de lo poco que sabe : que volvi ó en sí el herid o y que fe llaman Ramiro . Crec e el amor mutu o del conde y de la Infanta . El rey Teobald o aparec e y tras un diálog o con el conde , decide llevársel o a la cort e (34b) . El poet a nos lleva ante la Reina de Aragón (35a) . Le informa n los ejecutore s de la muert e del conde , que temen la reacció n del puebl o airado y fuerte . La Reina declar a sus principio s maquiavélico s (35b) : [24] 15 4