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51 Historia eclesiástica y civil de la célebre ciudad de Ceuta Es un hecho cierto que la Iglesia africana contaba con más de cuatrocientas sesenta sedes episcopales, pero no llegan a doscientas aquellas cuyos nombres conocemos. La causa de haber tantas sedes episcopales es que las erigirían aún en pueblos de poca importancia; práctica que el Papa San Gregorio reprobó como contraria al decoro y respeto que se debe a la dignidad episcopal, pero práctica muy antigua, pues, según queda dicho, en tiempo de San Cipriano se reunieron en Cartago ochenta y siete obispos y no asistieron todos, por- que siempre hay impedidos y alguna vacante habría también, de modo que bien puede afirmarse que entonces llegaban ya a cien las sedes episcopales de la Iglesia africana. Es de creer que esta práctica se seguiría igualmente en la Tingitana, porque si bien en lo civil pertenecía a España, en lo eclesiástico era parte integrante de la Iglesia africana. Siendo indiscutible que en la Tingitana hubo mayor número de sedes episco- pales, y que las había aún en pueblos de poca importancia, entre los cuales no puede contarse Ceuta, nos inclinamos a creer que en esta hubo sede episcopal en tiempo de los romanos, como según Moreri lo hubo en Melilla.