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55 3. Religiosos españoles en los colegios de misión de las Indias Orientales: 1545-1614 3.3. Los rectores españoles de los «colegios de misión» de los jesuitas en las Indias Orientales Debemos recordar que el Padre Maestro Francisco Xavier Jaso Azpilcueta, tras el fracaso de su intento de ir a Jerusalén (1537), pedirá permiso al Papa Paulo III para ir a misionar a las Indias Orientales. Obtenido el permiso se trasladará a Lis- boa (inicio del invierno de 1540), donde se preparará para, siguiendo la vía marí- tima oriental o portuguesa, llegar a Mozambique (agosto de 1541). Allí permane- cerá todo el otoño y el invierno, esperando a la primavera para poder navegar a Goa, territorio al que llegará en mayo de 1542. En otro momento hemos señalado que sorprende la labor misionera desarrollada por el Padre Francisco Javier en las Indias Orientales; labor que se extendió desde la India a Japón (donde estuvo en dos ocasiones), en un periplo misionero que viene marcado por los nombres de Cabo Comorín, Malaca, Ternate, costa de Trabancor, Coulan, Cochin, Bazaín, Damán, y otros entre los cuales se puede señalar una parada en las Islas Filipinas (Revuelta. 2015. 120-123). 20 Conviene recordar que la Compañía de Jesús tuvo «en las partes de Oriente» tres provincias: a) la de Goa, «cabeza del estado, a que lla- man del Norte», con sus misiones de Monomotapa, Mogor, y Etiopía; b) la de Cochin, o Malabar, «por otro nombre, del Sur» (con las misiones de Malabar, Pegú, y Maluco; y c) la del Japón y China 21 . No vamos a detenernos aquí en el análisis de las circunstancias y motivaciones que incidieron en la creación de los primeros colegios de misión (Revuelta. 2015) en las Indias Orientales; pero sí vamos a detenernos en los religiosos que se cons- tituyeron en sus primeros impulsores. Sin embargo, antes de dar cuerpo a nues- tro propósito, debemos recordar el carácter renacentista y humanista de esos cen- tros que denominamos «colegios de misión», muy diferentes de lo que podían ser «escuelas misionales». De hecho, los mismos jesuitas diferenciaban ambos tipos de instituciones educativas. Si como ya hemos señalado en otro lugar, los «colegios de misión» venían a tener un carácter universitario por cuanto en ellos se estudiaban las Artes liberales, Filosofía y Teología, las «escuelas de misión» además de centros catequéticos, eran instituciones académicas de nivel elemen- tal, donde los jóvenes aprendían a leer y escribir en español, y algunos en sus pro- pias lenguas nativas y en latín (O’Neill y Domínguez. 2001, p. 1423). Antes de seguir adelante debemos precisar el contexto en que nuestro objeto de estudio se manifestó. Decíamos más arriba que la Compañía de Jesús tenía, al momento en que se refiere la crónica (años 1607 y 1608), tres provincias «en las partes de Oriente», según la información que nos transmite Cristóbal Suárez de Figueroa: a) la de Goa «cabeza de Estado a que llaman del Norte»; b) la de Cochín, o Malabar, «por otro nombre del Sur»; y c) la de Japón y China. Por lo que respecta a la provincia de Goa, debemos destacar que había en ella «cerca de doscientas sesenta personas de la Compañía» (Suarez de Figueroa, p.21), que 20 Para profundizar en la labor misionera de los jesuitas en las Indias Orientales pueden consultarse las crónicas de los padres Francisco Colin ( Labor evangélica, ministerios apostólicos de los obreros de la Compañía de Jesús…(1 ), y Luis de Guzmán ( Histo- ria de las misiones que han hecho los religiosos de la Compañóa de Jesús, para predicar el Sancto Evangelio en la India Oriental y en los Reynos de la China y Japón (1601)). 21 P. Guerreiro, Fernão, S.J. Historia y anal relación de las cosas que hicieron los Padres de la Compañía… [traducción al castellano por Christóbal Suarez de Figueroa. Madrid. 1614. p. 21].

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