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193 13. TRADUCCIÓN DE LA CULTURA DE LA AMAZONÍA ECUATORIANA AL ESPAÑOL: LA CRÓNICA DEL CAPUCHINO P. MANUEL LABAKA a entender con el mensaje de la palabra, la Buena Noticia, cuando desconozco comple- tamente la lengua? 20 Condición fundamental, imprescindible, es familiarizarse con su lengua y sus costumbres 21 . Tendría que utilizar gestos y símbolos y el mayor era el crucifijo que llevaba al cuello. Ya lo había experimentado cuando el joven Araba le preguntó: Quino i? ¿Qué es esto? Este es Jesús. Su madre es María. Labaka quería completar el mensaje, pero no podía y entonces lo intentó recu- rriendo a las otras lenguas que conocía: quichua, eusquera castellano…; incluso recurrió al chino y dice: me trabuqué de palabras. Murió por nosotros en la cruz; resu- citó y vive con nosotros 22 . No le entendieron nada o al menos eso creía él. La interferencia de lenguas se produce con bastante frecuencia y en diferentes ocasiones. A pesar de todo, el mensaje llegó. Cuenta Labaka que un atardecer el joven Araba le buscó para preguntarle por el significado del Crucificado. Y escu- chó muy claramente que le decía la palabra con que ellos designaban al Creador, preguntándole si Jesús era el Creador Huinuni . Con la cabeza lo confirmó. El joven se le acercó y con especial reverencia besó por tres veces el crucifijo que pendía de su cuello. Quise que me repitiera en Huao esa palabra: HUINUNI que no había captado, no lo entendió y se fue. Que suponía, ¿la aceptación del Dios desconocido o la identificación del mis- mos Dios? ¿Aceptación inicial del Dios desconocido? Creo que sí y esto hizo brotar una ora- ción desde el fondo de mi alma 23 . 13.8. Aprendizaje de la lengua El P. Labaka cumplió su misión de pacificador para que no molestasen a los tra- bajadores de la refinería petrolera y el jefe, Sr Gothier, consideró que su presencia era prescindible y despidió al P. Alejandro porque ya no le necesitaban. Para continuar con su misión, los capuchinos necesitaban nuevas vías de comu- nicación y eligieron el río Yasuní. El P. José Miguel había oído rumores de disgusto de los misioneros lingüistas con las actividades de los capuchinos y no dudó en entrevistarse con el Sr. Glea- son que reconoció « no tener propiedad sobre los aucas» y le aseguró que el Insti- tuto haría todo el esfuerzo posible para facilitarles el aprendizaje de la lengua huao. Más tarde, Mons. Labaka se entrevistaría con el Director General del Instituto en Quito, el Sr. Donal que: Reafirmó el propósito del Instituto de facilitarnos todo el material disponible y, además, organizarnos un curso gratuito para el aprendizaje del Huao con sus mejores profesores y hasta con algunos Aucas 24 20 Ibidem p. 82 21 Ibidem p. 151 22 Ibidem p. 82 23 Ibidem p.82 24 Ibídem p. 98

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