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-31- biente social? Vedlo si nó en lo que ocurre en toda esa región, digna de mejor suerte. Puede tener Colombia los terrenos más fértiles del mundo, las más ricas ininas del globo, pero si carece de. vías de comunicación que extraigan y exporten sus productos, es lo mismo que si no !,os tuviera. Esto, en cuanto a lo que afecta a los pueblos de las Provincias de Padilla, de Valledupar y de La Goajira. Mas existe para nosotros una razón potísima que inclinará vuestro ánimo, y sobre todo el del actual Gobernador, doctor Manuel G. Angulo, a comenzar cuanto antes esta obra de perdurabl,e memoria para el que la realice, y es-la misma Sierra N evada. T iene esta cordillera toda suerte de climas v temperaturas, desde la tórrida hasta la g laciaL y desde el clima más palúdico y nocivo hasta el más sano, fresco y reconstituyente. Toda la costa está azotada por una enfermedad \\,amada anemia tropical; el terrible flagelo del paludis– mo, que se ceba especialmente en la gente de– dicada al cul t ivo del banano y en los que viven en esa región; !,a fiebre amarill a, que, salvo ra– ras excepciones, ataca a cuantos no han nacido en esas costas; la necesidad de mirar por la salud de la fuerza que el Gobierno tiene en toda la costa, y el bienestar general de c~antos vi– ven a orill as del mar, exigen una población en la cordill era, que reúna todas las condiciones de salubridad, que sirva para cambiar de esta– ción, recobrar la salud o temperar cuantos lo necesiten y quieran. . He visto un punto en la N evada muy a pro– pósito para la fundación de esta ciudad-y que someto a la consideración del señor Goberna– dor y de una Comisión nombrada por él, para ver si es así;-el cua l está sit uado a una altura de 2,000 metros sobre el nivel. del mar, y al que no dudo aplicarle los conceptos que el. doc– tor José M. Goenaga aplica en su opúscul o Colonización de~ Sierra Nevada a la antigua

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