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-9- dirección a la Sierra Nevada. Cuatro horas gas– támos en llegar a la primera estribación de l.a Sierra, conocida con 'el nombre El Volador. La sombra que enfre nosotros proyectaba el" bosque virgen nos dio fuerza para ll,egar a Que-· brada de Andrea, donde almorzámos. Después de un l,igero descanso continuámos nuestro via– je por toda la cuenca del río Clara; pasámos la cabecera de este río, formado por una con– cha fertilísima, buena para la producción de ca– ña de azúcar, cacao, café y ganado; pasámos por el antiguo pueblo de S<1n Pedro y bajámos al valle del río Garavito, donde está Pueblo– viejo, lugar de civilizados. Descansámos un día en este pueblo, situado a 1,400 metros sobre el nivel del mar, con una temperatura media de 20 grados centígrados en medio de una pequeña sabana, junto al río Garavito, Aquí viven los únicos civilizados que comer– cian con los indios arhuacos, cambiándoles sus artículos agrícolas por herramientas, calderos, machetes, pescado y ron, ganándose el 300 o 400 por roo del valor ,de la mercancía. El 24 salimos para Santa Rosa, donde nos esp'eraban los indios para hacerles la fiesta de .su patrona. Después del sacramental hanchi– gachi balou y de un fuerte apretón de manos, nos dirigimos en procesión a la casa cura!. En el trayecto iban bailando las mujeres el kuishi, y el kuimushi los hombres, volviéndose cons– tantemente hacia nosotros, haciéndonos pro– fundas reverencias. Les hicimos la fiesta y la procesión de la santa, recorriendo todo el pue– blo, precedido~ de los indios que no estaban embriagados, pues hay que notar que desde el primer día comienzan a beber guarapo, a bai– lar durante el día y la noche, hasta que termi– nan las fiestas. El,día 28 seguimos a pie para San Miguel,que– está situado cuatro horas más arriba, siguien– do la cuenca del Alueshi, afluente del río An– cho,a unaaltura de r.86o metros sobre el nivef