BCCCAP00000000000000000000259

Pasamos con ellos un par de horas muy agradables. El doctor se percató de sus medicamentos e indicó para qué servían. Recetó al soldado Valarezo para su dolor de oídos. En la misa cantamos villancicos; intercambiamos periódico militar por revista navideña y nos brindaron una sabrosa merienda y un pan muy bueno de huevos de charapa. Nos despedimos y fuimos a pasar la noche en casa de don Pedro Vázquez. Subimos a su casa todo nuestro equipo y los encargos de comes– tibles quedaron en la embarcación. Al otro día comenzamos con dar una buena lavada al deslizador, pues del banquete de los perros, quedaron los restos del mismo. Llegó la hija de don Pedro, casada con Torres; se participó de la misa y se alivió con medicinas los achaques de don Pedrito y de doña Micaela. Su hijo Moisés, de unos 15 años, no nos acompañó en el acto religioso, pues según él tiene "empacho de misas" (terminó la escuela en este curso). Nos brindaron ellos un buen desayuno y agradecimos mucho la papaya. Para celebrar las fiestas brindamos nosotros una copita de "María Brizard". Pantoja: lapso de larga espera. Al fin conocemos al nuevo coman– dante peruano, Tnte. Coronel Hernández, que da la impresión de ser una persona distinguida. Dice que la religión mantiene en alto la moral de los soldados. Solicita al Padre les den una misa una vez al mes y ellos se encargarán de buscarlo en el Yasuní. M!ERCOLES 22. Cerca del mediodía los observo: el doctor, parado, domina el motor y parece lo hace muy bien. Miche también parada se la ve satisfecha del viaje. Ha disfrutado; fue un acierto invitarla; algunas de las familias de por acá la conocían, tienen muy buena impresión y datos de ella pues con atención y cariño los ha tratado cuando alguno de ellos estuvo hospitalizado. Según opinión de Miche, al doctor se le ha visto cariñoso y solícito con los bebés, sin la preocupación de que le mojen, tranqui– lo, feliz y, como siempre, trabajador. De Fabiola ella no da su opi– nión ni tampoco el doctor. La interesada dice que pasó muy bien estos días de preparación a la Navidad, la fortalecerán para el resto del año y del 72. No la ilusión del primer viaje, pero sí el reposo y la visión de la edad y la experiencia de por aquí. YASUNI : 11,15 del día 22, a cinco minutos de casita. Bendito sea Dios. Nuevo Rocafuerte- Diciembre 1971 216