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24 Domingo. En el catecismo les puse las cosas claras respecto de los gringos. El que vaya de continuo allá o me entere que oye algo de religión de sus labios, no lo tendré por mío, con todas las consecuencias respecto de mi casa, iglesia y escuela. No sé si llegarán a entenderme. Al principio llevaremos las de perder, pero el tiempo nos dará lavictoria. 25 Por la tarde llegó Bolívar Londoño con su mujer. Estuvieron cenando en mi casa. Llamé a los trabajadores Simón y Vicente y no quisieron venir. A mi parecer les molesta a esta gente que traigamos aquí inganos, como son los niños de la escuela, hijos de Tangoy. 26 Bolívar se estacionó en casa de los gringos. Tuve que ir allí a comprar algunas cosas. Empeñados en que me quede a comer allá. Y si no, el sábado o el domingo. Yo, muy sonriente, les dije que ya lo pensaré. Lo mismo que ir a oír la radio . . 27 Por la tarde no vino ningún niño a la escuela. Yo me metí al monte y maté un sajino. Cecilio vino a traerlo y le di una pierna y la cabeza. 28 Por la tarde 5 nmos se pasan en casa de los gringos y no quieren venir a la escuela. He ido furioso a casa de sus papás y les he despachado de la escuela. Veremos cómo responden . ¿Los gringos no podrían decirles que vengan a la escuela? ¿o los entretienen para que no vengan? 29 Hizo la avioneta 3 vuelos por los militares. Trajeron sólo carga. Los jefes pasan por la pica de Montúfar. Medio a la fuerza me invitaron a comer y tuve que aceptar. Estuvo el Coronel Chávez y el Tte. Gallardo. Fue una buena comida. Los 5 chicos despedidos hoy no vinieron. Hoy me llegaron 2 cajones de Roca– fuerte, con víveres y medicinas. FEBRERO -1960 1 Los hijos de Alejandro, que eran de los despedidos, han veni- do a la escuela y todos los demás. 139