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CARTA 13 USTED TIENE ALMA Carísimo en Cristo: Podrá usted, sin duda, notar que en este vértigo en que vivimos en el mundo moderno, aun los que se tienen por católicos, se preocupan más del bienestar material que del progreso del esplritu. Hay quienes viven tan ocupados que no se acuerdan siquiera de que tienen alma. La buena mesa, el traje elegante, las diversiones, las amistades, el aumento de riquezas y bienestar, la prosperidad de la casa y fami– lia absorben por completo las ideas, las facultades, las energias, toda la actividad humana. Créame usted : al cruzar las calles y plazas de nues– tras modernas ciudades, viendo la multitud de hombres y mujeres que se agitan por la lucha de la existencia y por el disfrute de la vida, me viene a la mente el pensamiento de que cuán elocuente sería el grito del hombre que alzara su voz en medio de ese hormigueo humano para decir a esa multitud : «Hombres, tenéis alma que merece vuestras atenciones·y cuidados, alma que es lo más noble de vuestro ser y que habéis de hermosear con el ejercicio de la virtud, a fin de poder presentarla un dia pura ante Dios.» A buen seguro que muchos, al oir estas frases, como despertando de un profundo letargo, habrian de res- · -67-

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