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4. FLORENCIA Cuentan que en Florencia, cerca de Nuevo Rocafuerte, existe tm lugar que contiene joyas de gran valor, propiedad de una tal Señora Tejerina, que las enterró estando ya para morir. Por los días de Semana Santa, cuando florece el higo, se oye en el lugar ruido de gente, lloros y quejidos, luces y arrastrar de cadenas: -¡Chilín, chilín, chilín!.. . A mitad de la noche, aparece una gran luz, como fuego que sale de algún lugar del suelo . Los hombres miedosos huyen tem– blando . Pero quien sea valiente y se llegue al fuego, bastará con que acerque su machete a la llama y ésta se apagará . Al amanecer, si cava en ese lugar, hallará el tesoro y las joyas que enterró la Señora Tejerina . .. * * * S. EL ENFERMO Y LA SALAMANQUESA En el Paushi Yacu hay brujos muy sabios . En cierta ocaswn un indio cayó enfermo . Estando ya para morir, sus familiares lo llevaron allá para que lo curaran . En el lugar se reunieron todos los brujos, colocándose alrede– dor del enfermo . Una india brindó chicha a los presentes. Tomaban y tomaban, esperando ... De pronto, una salamanquesa cayó del techo, golpeando cerca del enfermo . -¡Ay, ay, ay, -cantaron los brujos -la salamanquesa te entró por los sesos, la salamanquesa te salió por el ano y te devoró las entrañas, ay, ay, ay! El enfermo murió esa misma noche, y las mujeres le lloraron varios días . .. 23