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12. Yasuní: Río que divide la actual frontera con Perú. Nace en las pequeñas colinas que se levantan 300 kms. al oeste de su desemboca– dura. Se nutre de las lluvias locales a través de multitud de quebradas y riachuelos, los principales de los cuales son: el Pañono, el Cahui– meno, el Ahuemuro, el Pindo, Garza y Taracoa. Es de aguas terrosas, y llega a alcanzar desniveles de 10 metros. Navegable en invierno has– ta muy arriba, en verano seca de tal modo que se hace con dificultad practicable .hasta Garzacocha (km. 120). De ahí en adelante se con– vierte en un laberinto de troncos y palos insalvables. El Yasuní fue desde antiguo asiento de algunas familias de la tribu Huaorani (Aucas), quienes se dedicaban a la caza en las zonas altas (actual Dicaron o Rz'o de Piedra). Al establecer contacto con ellos, algunas familias decidieron asentarse cerca de la bocana de Garzacocha, en Táparo Anameni, aceptando la pacífica convivencia con los Quichuas. En realidad, dada la distancia y las dificultades, la zona es visitada circunstancialmente, y aún mantiene gran parte de la riqueza de su variada fauna. Lagunas. Margen izquierda. l. Limoncocha: Llamada antiguamente Capucui. Se trata de un verdadero lago, formado por un viejo brazo del río Napo cerrado hace cientos de años por tierras aluviales, y recubierto posteriormen– te por la vegetación hasta convertirse en selva impenetrable. Además de la laguna propiamente dicha, hay una más pequeña con las mismas características, y otra llamada Yanacocha o Laguna Negra, por el color de sus aguas, que no es otro que el de las aguas del río Capucui. Es esta laguna de Lirnoncocha un lugar privilegiado y hábitat incom– parable para cualquier tipo de fauna tropical. En torno a ella se construyeron las instalaciones del Instituto Lingüístico de Verano, y actualmente el Colegio Bilingüe Bicultural de la zona, además de una comuna Quichua. Por hallarse en la ruta diaria del turismo naciente va poco a poco perdiendo su aire silvestre y natural. 27