BCCCAP00000000000000000000251

XII LA IGLESIA EN LA SELVA Misiones. Fue Gonzalo Díaz de Pineda quien abrió la ruta de la Canela. El año 1541 Gonzalo Pizarro organizó, con la cooperación de Fran– cisco de Orellana, la expedición mejor montada hacia el este, y en ella viajaban dos sacerdotes : el rnercedario fray Gonzalo de Vera y el dominico fray Gaspar de Carvajal. El año 1559 los caciques de Baeza ya se muestran ante los espa– ñoles corno cristianos bautizados por los antedichos sacerdotes. Fue precisamente este año cuando llegó desde el convento de Quito la primera expedición de misioneros: cinco dominicos que hablaban el quichua. Estos misioneros, con la colaboración de un sacerdote secular, extendieron su palabra a lo largo de las riberas del Coca y por los valles aledaños. El padre jesuita Rafael Ferrer llega para evangelizar a los indios Cofanes el año 1603. Fue el fundador del pueblo llamado San Pedro de los Cofanes (1604). El año 1605 el Padre Ferrer exploró el río Aguarico y el Napo, llegando hasta el Amazonas. Nos habla en sus cartas de las tribus de los Coronados, Omaguas y Avishiras. Tras la muerte del Padre Ferrer (1610) hubo que esperar diez años (1620) para que nuevamente tres sacerdotes jesuitas de~cendie­ ran por Baeza a Puerto Napo. Trabaron contacto con Encabellados, Coronados y Avishiras, hasta llegar a los Omaguas que vivían entre el Aguarico y el Napo a partir de la quebrada del Eno. Fundaron con unas cien familias el pueblo de San Juan de los Omaguas. 169

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz