BCCCAP00000000000000000000251

En estos momentos existen dos grandes consorcios : Palmoriente (sector Guayusa) y Palmeras del Ecuador (sector Shushufmdi), con una superficie estimada en 10.000 Has. La producción ya ha comen– zado en Shushufindi y está próxima en Guayusa. Pero hay proyectos de tal envergadura sobre plantaciones de palma africana en esta pro– vincia (hasta 400.000 Has.) que hay que dar un toque de atención. Nosotros no podemos menos de aceptar que el producto del acei– te es necesario; pero reconocemos también que estas Compañías no han tratado en ningún momento de resolver el problema social de la zona mediante una mano de obra bien pagada y cumpliendo toda justicia. Más bien los datos que se reportan hablan a todas luces de muchas injusticias con los trabajadores. El Ecuador comerá un aceite injusto; sin embargo las ganancias que revierte la palma son sustancio– sas para el productor, pues a pesar de enfermedades de la palma que hacen que, en sectores, se pierdan hasta en un 40 por cien~o. eso no obstante , su explotación sigue siendo rentable. Y no sólo este punto tiene connotaciones graves. El otro, la tala de la selva, es brutal. A las tierras empleadas en las plantaciones de palma hay que añadir las miles de hectáreas taladas por los colonos para potreros y otros cultivos. Pero ya hemos dicho que la muerte del árbol primario es el comienzo del fin. Con el tiempo se hablará de la muerte de los suelos y, con seguridad también , de la muerte del agua . Insistimos una vez más que la selva se acaba; y si tanto colonos como multinacionales colaboran a la locura de la tala inmisericorde, bastarán veinte o treinta años más para que el bosque mayor del mundo se convierta en un arenal. Necesitamos aceite; pero también bosques y agua. ¿Habrá dife– rencia entre vender el suelo nacional o desertizarlo mediante conce– siones locas? Comercio de los productos. Hasta época reciente los productos agrícolas eran para el consu– mo familiar, o se vendían en pocas cantidades en el naciente pueblo de Coca, en Pompeya, Limoncocha; Tiputini o Rocafuerte. 106