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-91- D.espués de encomendar a Dios el alma de la que le dió el ser, marchó Fr. Francisco de Peralta a Zaragoza y ya no volvió más a Pamplona. · Por aquellos días se hallaba el ambiente de la nación bas– tante cargado. El altivo y despótico Conde-Duque de Olivares cayó del Poder el día .17 de enero de 1643, víctima d'e una conspiración, en la que trabajó activamente [a Reina. La nación oo general aplaudió la caída del real favorito. Pero a los pocos !lleses-mayo de 1643--sobrevino la batalla de Rocroi, en la que, como se ha escruto acertadamente, «España cayó, aterrando al orbe con el llStruendo de su caída,. . Los gloriosos tercios españoles, en los que nuestro héroe tan– to~ laureles reportara, lucharon heroicamente, pero quedaron deshechos, y dicha fecha marca una época de descenso en la historia de nuestra nación. Fray . Francisco, entretanto, seguía llevando una vida de re– tiro y de humillación; si le acontecía pasar por las ciudades que habían sido principalmente teatro ·de sus fechorías pasadas y ga– lanteos, y donde tanto ·había llamado la atención por su altivez y gallardía, procuraba atravesan por los lugares más concurridos cuimdo llevaba alguna carga sobre los hombros o iba de otro modo humillante, a fin de rebajarse a los ojos de las mismas per– sonas que tan soberbio y lujosamente ataviado le habían co– nocido. Hallándose en Sanlúcar de Barrameda se enteró que aún vivía allí un caballero muy pruncipal, a quien en tiempos pasados in– sultó. Fué a casa del tal caballero con la excusa de pedir estiércol para la huerta del convento. Los criados lo reconocieron y dije– ron. a su señor quién era el lego' que se encontraba en la puerta cargando la acémila. Inmediatamente el señor-quien por lo que se ye no ena rencoroso, antes al contrario, tan noble de linaje como de carácter-bajó a saludarle y el Hermano Francisco se echó a sus pies pidiéndole perdón. · El caballero le abrazó, y no pudiendo conseguir que 'dejara a un .criado la conducción del estiércol, pues Fr. Francisco se negó murió Doña Isabel Cruzat madre del Gran Prior de Navarra, recibió los Santos Sacramentos y testó y se enterró en San Cemín, y se le an hecho su entierro· y honras y Jos demás sufragios y la enterró el cabildo de la catedral.; (Está sin firma.) (Archivo Parroquial de San Saturnino, de Pamplona. Libro 2. 0 de Difuntos, folio 42. · ,_
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