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-43- tra de. la volanta? que ay en my de favorecerle y hacerle merqed, he tenido por bten de hacersela como por la present.e se la hago de los quarenta mü marauedis de acostamiento que Don Miguel de Redin su hermarw Ueuó en cada un afio y han vacado por su fallecimiento, moneda destos .Nues– tros Reynos de Castilla o, su justo valor durante Nuestro beneplácito.•• Y assí os mandamos que los pongais y assenteis en los Libros de Acosta– miento... y pagueis al dicho Don Tiburcio de Redín durante Nuestro beneplácito de que a de comenqar a g~ar desde quatro de diciembre del afio passado de mili r seiscientos r treinta r quatro que le hice esta mer– ~ed en adelante, conque sea obligado a tener armas y cauallo y seruimos según :r de la manera que Nos siruen y tienen obligación a seruir las otras personas que de Nos tienen acostamientos en. esse Reyno y toTnad la carta de pago... con la qual y esta nuestra {:edula... mandamos a los Nuestros Oydores de Comptos y /ueqes de Finanqas del... siruan y passen en ellos de legítima data todos los marauedises que conforme a ella diéredes y pagáredes... que as sí es Nuestra voluntad y asentad su traslado en los dichos Libros y originalmente la volued al dicho D. Tiburcio de Redin para que la tenga y lo en ella contenido aya efecto, de la qual ha de tomar la r~on D. loan de Castillo, Nuestro Secretario r del Registro de Merce· des, dentro . de quatro messes primeros siguientes, y declaro que áesta /lf erced se ha pagado el derecho de la media anata. Fecha en Madrid a catorqe de henero de mili y seiscientos y treinta y qinco afios.-Yo .el Rey. Por mandado del Rey Nuestro Sefior.-D. Félix Sebastian de Contreras. · Tomé la raqon en veinte y dos de Febrero d,e miU y setecientos y treinta y qinco.-D. Juan de Castillo.-(Está ·mbricida con tres rúbricas.) Que se assiente en los Libros Reales y se le buelva .el Original a la parte. -Proveyó y mandó lo sobredicho la Cámara de Comptos Reales en Pam– plona, lunes a dos de Abril de mil y seiscientos y treinta y t;inco años, presentes los señores Diego de Salinas y Herasso, Doctor Don luan Gascón de Araqiel r Don Juan de Echanz, Oydores y Jueces della y asentar por auto a mi Martin Garay, Secretarios. Digo a quatro del dicho mes.> Siempre genenoso, sirvió ·durante varias temporadas en el Ejér– cito, sin aceptar retribución alguna. El rumor de sus heroicos hechos se fué extendiendo de día en día, suscitando la admiración del público, que le «bautizó» con la honrosa apelación de <<Júpiter Hispano». Una aureola fantástica rodeó en el Nuevo Mundo su nomhre, terror de los piratas. De ello da testimonio el hecho de qve cuando las madres ame– ricanas querían hacer callar a sus hijos llorones o conseguir que se formalizasen a los traviesos, no tenían más que decirles: <<Que viene Redín..» Y cuentan las crónicas que al oír esta amenaza, como por .ensalmo cesaban los unos de llorar y los otros de tra– vesear.