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-46- el derecho que á ella tenía; y por eso todos vendrán á la vida privados de lo que era suyo, de la gracia santificarrte; á no ser, que en el mismo instante que comiencen á existir, Dios por pura misericordia 6 por los méritos de otro les infunda la g racia y nunca ni un solo instante queden privados de ella. Y tal ha suce– dido con María que Dios, no por pura misericordia sino por los méritos de su Hijo Jesús ofrecido en el ara de la Cruz propter remissionem omnium delictorum, ha que– rido preservar á María y solo á María, porque era ele– gida para ser su madre, de toda mancha de pecado. Luego la opinión franciscana acerca del motivo de la Encarnación tal como la entiende Escoto en nada se opone á la Inmaculada de Pío IX, no hay contradicción, se explican perfectísimamente. Resumiendo: la madre de Dios en la opinión fran– ciscana es una hija de Adan; como todos los demás hijos, se hizo solidaria de la gracia ó del pecado de Adan; pecó Adan, perdió toda esa gracia, luego desde aquel momento todos necesitan de la misericordia de Dios ó de la redención-de hecho Dios eligió la re– dención-luego todos ello,¡ necesitaron de la reden– ciól!-y si María y no otra mujer disfrutó de los más ricos frutos de la redención, fué porque aunque inclui– da en Adan tenía una dignidad que no tenían los demás hijos de Adam; cual era el haber sido ya de antemano elegida para ser madre de Dios. Cenclusión: luego el proceso lógico del Sr. Larumbe no cabe en la teología franciscana. III E.rplicación del Sr. Larumbe Para que mejor puedan apreciar los lectores la teo– ría del Sr. Larumbe, quiero copiar íntegro el texto y la página donde desarrolla sus pruebas y sus con– vicciones,