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- 131- <,,.c===--.. '=~ : ·c-=o.. .-.---=~--==-~-.-o=. =-~-=f 1! !l 1 1 .:.·.¡,' E l carácter propi o de la herejía del siglo X IX, /!,, 1 ~:1 que la distingue de cualquiera otra , es el no pre- sentar nin g uno que nos pe•·mita señalarle un lugar determinado entre las negaciones de los dogmas del cristia nismo. Esta herejía no es una ¡ negación; es un conjunto de negaciones qu e in· tenta n desmentir tod as las afirmacion es católi– cas . Es una he rejía que niega lo que el cristia– nismo afirma para afirmar lo que el cristi anismo niega; para esto sigue sus huell as, para destruir lo que él edifi ca . Proc lamando desde luego á la razón humana comn única fuente de la verda d con exclusión de la nevel ación y de la fe , álzan– se los secuaces de esa herejía contra t odo el ot·den sobrenatu ral, calificando de mera hipóte– sis cuanto no esté al alcance de nu estro entendi– miento. "La razón es la única regla de nuestras creencias, nu estra conciencia lib1·e es el único juez el e nuest ros pensami entos y de nuestros actos. , He aquí la f<írmula que r etrata de cuer– po entero la herejía del siglo XIX; he aquí el R aciona li smo en todo su odio contra los dere– chos de Dios. Es el g rito que dió Lucifer cuando =¡ . alzó bandera contra el Señor de los eJ"ércitos :¡ 1! ~~e~~~~~ 1 ~~-~lo 1 ~n~~: ~; ~~~~~~~~ ~~~~e,::!~l::~~:t~= l; " Dios pan1 negarle los derechos que ti ene sobre 1 ·¡ el hombre; hace la guerra á Jes ucristo que vino 11 .1 para hacerlos p revalece r; y diri ge sin cesar sus 1 1 1[ ataques con tra la Ig lesia, que es la continuadora 1 ,[_~:-la misión del Hijo de Dios hasta la consu- ¡ d'- ···---- - ·--- --~~c.-c.=-~~--,...,--=='\:)