BCCCAP00000000000000000000242

168 II<UIIIRTI!I DE LA VENIIIRABLl!l FUND.\DORA cesis de Cataluña: era pues conocido. Conocían– se bien en los Hospitales la abnPgación y cuidados de las religiosas; y en los Colegios de niñas su celo y aptitudes para la enseñanza. Pero, parece, que los Directores Generales cre– yeron llogado el momento de hacer prevalecer en la Obra, las actividades pedag•lgicas sobre laa: benéficas con los enfermos de los Hospitales. Esto se ve bif'n en las tendencias y rumbos im– presos al Noviciado, •con mano fuerte• según dice el P. Sala «Y en las personas de m:is dispo– sición que empezaron a entrar• dice el mismo. As•; en el momento de estar legalizado el Insti– tutO" y reconoci~o definitivamente por la Sant& Sede, tendrían en sus manos un auxiliar pode-– roso en la instrucción de las niñas, precisamente cuan.lo la t·elativa calma política, permitiría de– sarrollar labor eficiente en ese terreno trascen· dental casi sin cultivo en España agitada por tantas guerras y disensiones políticas. Así se exphca bien la prescindencia que hicieron de la V. Fundadora, con quien, creyéndola inutilizada e inconsciente, no se podría contar para las in– novaciones proyectadas. El historiador de la M. Joaquina, P. Nonell,. S. J . .arremete briosamente contra esta prescin· dencia, y se esfuerza en no admitir los planea nilovos del Prelado V1cense. Nosotros respeta· mos su criterio, pero, por nuestra parte, nos esforzamos en encontrar justificación a los in· :,

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz