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-10- Un Deo Oratias en ·la adversidad vale por mil alabanzas en la prosperidad. Puede Dios no que– rer •lo que se hizo, pero Dios se complace en que nos sometamos al hecho ( •no siendo pecado) , por amor suyo.. Qui·en mira en todo suceso próspero o adverso la voluntad de Dios, la en– cuenha . .. y obrando porque así Dios lo dispo– ne, ganarnos siempre. Venerunt mihi omnia bona pariter cum illa. Además de que Dios dirige el curso de las cosas y El sabe las razones por qué permite los acontecimientos; aunque solo sea para aqui– latar el valor del oro ... está bien ... Nuestro mal está ·en que apartamos los ojos de la voluntad divina y los ponemos en la vo– luntad de los hombres. De ahí dimanan nues– tros mayores dolores. Por egoísmo espiritual deberíamos acostum– brarnos a mirar todo como cosa de Dios . .. En esto hay muchas ventajas: méritos, menor do– lor, expiación, ejemplo .. . Es de creer que con un acto de resignación damos más gloria al Señor que con muchas ·empresas gloriosas . . . Que con un silencio sufrido hacemos más pro– vecho a la Orden que con cien contiendas albo– rotadas. Hay una excepción; cuando es me– nester la justicia por obligación de cargo . . . A veces hay deserciones lamentables donde debe haber valentía del deber. . . Las consecuen– cias que afectan i1 la colectividad deben pre– valecer sobre las que 2tañen a personalidades particulares. Dios pone ·centinelas de Israel, no para que estén dormidos; ni J.es ofrece la vara de