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40 El Misionero práctico la compunción. Se les aconseja vayan a sus casas en silencio. Si la inclemencia del tiempo no permi!3 procesión. la despedida se hace en el templo, dando la bendición desde la grada próxima ·al altar. - XVI- LA PROCESION DE PENITENCIA · l. Antes del día señalado para confesiones de hom– bres. e. g. el viernes, se organiza una •Procesión de Pe– nitencia•. Los misioneros de fechas no muy lejanas.acon– sejaban a los fieles preparar pesadas cruces o leños para llevarlos sobre las espaldas. a pié descalzo, duran– te la procesión. Pero es aventurado imponer semejante acto de penitencia, porque se corre el riesgo de que al– gunos experimenten quebranto de salud. Y aparie de esto, puede haber sujetos malévolos que traten de hipócritas a algunos penitentes. 2. El Doctrinero anuncia desde el día anterior la excepcional procesión, exhortando a la asistencia. 3. Antes de comenzar la función, se prepara un gran CrU<;ifijo. El mayor que haya eli la Parroquia será el más adecuado. 4. El sermón de esa noche será acerca de la pron– ta COI} Versión, de la necesidad de la penitencia, haciendo entender al auditorio, que se trata de la penitencia del alma, del dolor que debemos sentir por haber ofendido a Dios. S. Terminado el sermón, se organiza la salida del templo en este orden: 1. 0 La Cruz parroquial acompaña– da de los monaguillos. 2. 0 Las mujeres de cuatro, seis u ocho en fondo . 3. 0 Los hombres casados. 4. 0 Los mozos. 5. 0 El Clero. 6. 0 Las autoridades y los varones que son

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