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10 El Misionero práctico 12. Los Superiores concederán tregua y descanso · a los predicadores periódicamente. a fin de que no su– fran quebranto su espíritu y su salud. (Constituciones, número 209). - II- ELEMENTOS PARA EL BUEN EXITO DE UNA MJSJON / > Nadie ignora que en el orden de la Divina Provi– -dencia, la Misión es una gracia actual extraordinaria con que Dios favorece a un pueblo. En el orden de los hechos es: una serie de predicaciones sagradas extra– ordinarias en que intervienen dos o más Sacerdotes en nombre de Jesucristo, enviados por la legítima autori– dad eclesiástica para provecho espiritual de uno o más pueblos. En consecuencia son necesarios tres elementos pa– ra el buen éxito de la Misión: 1. 0 La Gracia Divina: NEQUE QUJ PIANTAT EST ALIQUID.... SED QUJ INCREMENTUM DAT DEUS H COR. 111. 7). 2. 0 Misioneros aptos.-Jesucristo quiere operarios evangélicos que cultiven HABILMENTE su heredad. VJROS JDONEOS, pide el Concilio de Trento.-(1). 3.° Ceremonial o MECANISMO propio de la Misión. Es un error despreciar el ceremonial de la Misión y el MECANISMO o ESTRATEGIA de la misma. La Iglesia no desdeña las ceremonias augustas de la Li- • turgia, con las cuales se impresiona saludablemente la imaginación de los fieles y se educa su espíritu. (1) Sess. V, c. 2.