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Conferencias Particulares GUION PARA CONFERENCIAS A MUCHACHOS 1.• HOLLAR EL RESPETO HUMANO. Es agradable tratar con vosotros. Sois jóvenes, alegre", optimistas. Poseéis corazón lleno de esperanzas. Hoy un con• sejo básico. Vosotros sois la fuerza, el valor, el ímpetu... De jóvenes se componen los ejércitOs. Sin jóvenes ¿qué hubieran sido Alejandro Magno, Julio César... A vosotros acuden en casa cuando necesitan .un esfuerzo grande para un trabajo o empresa. Pero a veces quedáis paralizados por un defecto que parece insignificante; defecto que os hace caer en la co– bardía. Veamos un caso. Si mañana estando en plena Misa, le ruego a un niño de . 10 años que desde la puerta lleve al altar un objeto cualquiera, lo llevará sin vacilar y sin repa– rar en el numeroso público que llena el templo. Pero si hago ese ruego a un muchacho de 19 años ó 21. .. ¡Quiá! No se atreverá. Tiene miedo a tanto público; tiene miedo a las mu– jeres, a los ancianos, a todos. ¿Pues si se le dice que ante todo el público vaya a comulgar solo? ¡Imposible conseguirlo! ¡Cómo suelen pasar los jóvenes de una parte a otra de la Iglesia !... Corriendo como un rayo!... Antes que le vean las mujeres. ¡Es el miedo!. .. Eso se llama respeto humano. Cuando se trata del .cum– plimiento del deber hay que pisotear el respeto humano. El