BCCCAP00000000000000000000235

102 El Misionero práctico ser que no existe. Azotas al aire. Eres un inconsecuente. Y el hombre inconsecuente es un ser detestable y peligroso. Hará traición a cualquira. Nadie podrá fiarse de él. Será una indiscreCión admitirle a contratos.. No se podrá vivir con él. b) Me dirás que los que cometen otra clase de pecados incurren en la misma inconsecuencia. Cierto. Mas eso no jus– tifica tu error y tu culpa. Y ya que intentas abroquelarte y defenderte con los pecados ajenos, .te diré que no puedes com– pararte eón ningún otro delincuente. Porque ni siquiera pue– des aleg·ar las excusas o pretextos con que otros pretenden aminorar su culpa. Un ladrón se aprovecha de lo que roba o estafa en sus graves apuros de la lucha por la vida. El incontinente da pábulo a una pasión que le halaga. El que calumnia perjudica al prójimo para defensa propia. El que hiere o mata se desentiende de un rival. Pecan arrastrados por ia concupiscencia, no por odio a la p·ersona ·divina. Pero tú, blasfemo, ¿qué utilidad reportas con la frase injuriosa? ¡Ninguna!... Si careciendo de lo más preciso, has perdido la sensatez y montando en cól<>ra has pronunciado la frase sa– crilega ¿te ha venido a la mano la cantidad o el objeto que anhelabas? ¡No! Y tú ya s~lbías que tus ·imprecaciones no eran el medio para adquirirlos. No te compares con nadie .para defenderte... 5.• NOTA DISCORDANTE La creación entera te recrimina, porque vela por la honra de su Creador. Oid un instante: Un maestro músico de fama mundial compone una obra para orquesta; la mejor obra que ha bro– tado de su inspiración. Quiere que sea ejecutada por maes– tros en un festival, no por músicos de segunda categoria. Con tal fin les envía los papeles para cada instrumento. Todos

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz