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.--------------------- 94 Vida de S,..:a..:n_F_i_de_l____ _ _ tos de alegría de todo el pueblo. Este admira– ble concierto denunciaba a las claras los amo– rosos trasportes de éstos pueblos hacia el San– to. Todos a una voz proclamaban que el he– róico misionero era «el honor de su nación, el defensor de la religión, el angel tutelar de la patria. » Después de la ceremonia, los jefes deposi– taron el féretro en la cripta, bajo el altar ma· yór, en presencia del obispo y del clero. Des– de entonces acuden allí millones de fieles a implorar el favor del gran héroe de la fe. La primera sepultura, la de Seljanas, que– dó propiedad de los protestantes hasta 1897 en que la adquirieron los Capuchino~ de Suiza: levantaron estos una capilla en la que se cele– bró la primera misa el 13 de Julio de 1899 an· te una concurrencia inmensa de peregrinos. Desde 1622 no se había celebrado la santa mi· sa en aquella comarca invadida por la herejía. ------------- --------

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