BCCCAP00000000000000000000233

V.-Estoy en la cárcel, privado de.libertad 49 No hay otra cárcel temible más que la del in– fierno, ni otra esclavitud que la del pecado que conduce a ella. No hay otra libertad que la de la v.irtud que tiene por premio la posesión de la v.erdad sus– tancial para .el alma, y para el cuerpo, además de otros goces inenarrables, la facultad de recorrer esos mundos que se han hecho precisamente pa– ra él y pensando en él. Millones de justos que han sufrido la pena de la cárcel lo mismo que tú, gozan ahora de esa libertad. Abre tu corazón a la esperanza y consuélate con estas ideas, hermano mío. Organiza tu vida dentro de la cárcel misma. Entrégate si puedes, y v.enciendo todos los res– petos humanos, a la lectura de libros religiosos. La lectura v.a acompañada del pensamiento, el pensamiento conduce al deseo, y el deseo a . los actos correspondientes. Rara v.ez · falta en esa cadena ninguno de esos anillos, ni siquiera el úl– timo, cuando la lectura es frecuente. Si lees cosas buenas pensarás en Dios y ama– rás a Dios y además estarás siempre contento, que ése es, según dice Santo Tomás, uno de los efectos propios de la dev.oción: la alegría del alma. Sé también dev.oto de la Santísima Virgen Ma– ría. Refugio de los pecadores y Consoladora de •tngid~. y re..Ie "d' '"' e! Smto R-o.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz