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__1_5_2________ ~P~._A_n~g~el deA_b_á_rz_u_z_a____________ ¿Quiénes son los que llevan al enfermo a la clínica para someterlo a una operación dolo:rosa (pagando después al operador) sino su familia, es decir, los que más le quieren en este mundo? Cuando yo veo a una mujer aprisionando enér– gica y violentamente a un niño entre sus brazos para darle la medicina amarguísima que le ·ha de curar, dudo que aquella mujer sea su madre, si a los primeros gritos de la criatura, la aban– dona y deja de darle el medicamento. Pero si insiste, y forcejea y lo sujéta, .aún ha– ciéndole daño, diciéndole al mismo tiempo: c¡No te ha de valer! ¡La has de tomar!•. En seguida digo para mí. cEs su madre. No cabe duda •. Por el dolor, vengo en conocimiento del amor. Y había de proceder de otro modo con el hom– bre el Dios que le dijo un día estas palabras tex– tuales: cAntes se olvidará una madre de su hijo, que yo me olvide de ti>. No puede ser. El amor de las madres es una creación de Dios, y nadie da lo que no tiene. Por eso, con el corazón ·puesto en nues-tra fe– licidad, en la única felicidad que .merece este nombre; todo lo que puede ser un estorbo para ella, lo destruye. Dios sin compasión, aunque gri– temos, aunque lloremos. ¿Abusáis de vuestra salud o de vuestras ener- ;,. gías fÍsica,s? Pues os derribará en el lecho, redu– ciéndoos a la impotencia, por medio de una en– fermedad. j