BCCCAP00000000000000000000232

·- 197 -- todas las delicias. Desde mi infancia te bus– qué, y no me aparté de ti <lur.mte toda mi vida. ¡Oh vosotros todos los que pasáis por el camino, mirad ·y ved si hay un.t pobreza, como mi pobreza! Hijas de Sión, salid y ved al Rey Salomón con la diadema, con qut le coronó su madre, cuando reclinó en un pesebre al que se sienta siempre en el trono <le! l'ddre; cuando envolvió en pañales al que enderr,, L'n el hueco de su mano los cielos y la tierra. Mirad mis mantillas y pañales, en los cu.tk ·; fuí envuelto cuando niño, y si veis otro sem• jante a mí, venid yarguidme a mí y mi pobrez<~ . He áquí la señal que os di, y que os anm:– ciaron los ángeles; ha aparecido en la tierra ; hála realizado la Virgen María, como acabáis de ver. ¿Cuándo, oh pequeñuelos, empezaréis " amar esta pobreza, siendo así que os ha na · cido un parvulillo, dádoseos ha un parvplillo? A los ricos parece esto necedad, y a los so– berbios ignominia; mas a mí y a mis escogí– dos, sabiduría y gloria. Considera también, te ruego, otros hechos míos. Ayuné cuarenta días y cuarenta noches, no comiendo nada en ese tiempo, y después tuve hambre. Mira, pues, lo que hice; este fué el ayuno que eleg(, y que_cumplí perfectamente. ¿Quién me recompensará este trabajo, o quién

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz