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CAPITULO VII Del modo de hacer la oración mental (J) (1) El P. Crisóstomo Schem decía a sus novicios capuchinos: C'Finis orationis duplex est: Gloria Dei et salus anímarum. In oratione in primis horno promovet gloriam Dei»; por eso aun los apóstoles más activos amaban profundamente la oración corno cosa fundamen· tal¡ erit quasi signum in vita tua. Importa aprender el mejor modo de practicarla. Léase, pues, atentamente lo que aquf enseña el autor.) Aunque a todas las personas, de cualquier es· tado que sean, pertenece el darse a la oración mental, por ser el medio para vencer las pasio– nes, adquirir las virtudes y unirse con Dios, que es nuestro fin; pero con mucha singulari– dad .nos pertenece a los Capuchinos, porque · nuestra vida es mixta, de acción y contempla– ción, como lo fué la de Cristo nuestro Señor y sus apóstoles. Sin embargo la contemplación es preferida, como consta de la Regla, Cons– tituciones, Bulas apostólicas, del ejemplo de nuestro Seráfico Padre S. Francisco y de to· dos nuestros antiguos Padres, entre los cuales

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