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-199- Bauti&ta, y dijo de si,que era ·porque su ora– ción, su vestir, su éomer, su penitencia, su conversación, sus virtudes y todo él era voz que predicaba sanfidad; y tales han de ser las voces de los que a otros han de enseñar. Lo primero que ha de hacer el que ha de estudiar es dirigir a Dios su intención; porque el estudiar precisamente por ·saber es curiosi– :/tad; por ser alabado, vanidad; por ser hon– rado, ambición; pero el estudiar por hacer la voluntad.de Dios; para saber mejor servirle y poder aprovechar al prójimo, eso ha de procu– .rarse, y para estos efectos deseaba Salomón · la sabiduría. Ut mecum sit, et mecum labo– ret. (Sap. 9) Lo segundo, como la sabiduría sea don de Dios, no la ha de buscar solamen– te en los libros con el estudio sino también en la desconfianza · de si mismo y conocimiento propio, pidiéndoselo a su Divina Majestad con humildad, según aquello que dice el Apóstol Santiago: e Si quis autem vestrum indiget sapientia, postule! a Deo, qui dat omnibus affluenter(!.ajac. cap. 1. 0 ») Lo tercero, antes de ponerse a estudiar ·o escribir, se ha de poner en oración, como se refiere de Sto. Tomás de Aquino en su vida.