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CAPITULO XVII Del examen. Del modo de examinar la conciencia. (1) Una de las partes más principales y efica– ces medios que hay para el aprovechamiento espiritual y llevar el día concertado, es el exa– men de la conciencia, y como tallo encomien· .d11n San Basilio, S. Agustín y San Bernardo; porque con el examen se ahogan los vicios en sus principios, los cuales siempre están bro· tando, sin que se dejen arraigar·; se minoran las culpas leves, se evitan las futuras, y se ad– quiere la humildad, conociendo los propios de· fectos, y se satisface a Dios haciendo penilen- (1) Todos los maestros de la vida espiritual están acordes en la importancia del examen, tanto general como particular, para la autoformación espiritual del hombre: Lo definen: Conscientiae perscrutatio cum sin· gu/ari cura instituto ad vitium quoddam dominans ·extir– p.aq.dum, aut virtutem Oliquam maxime necessatlatn et excellentem exercendam., En esta materia debe es– tudiarse el quod y el modus,· qué·asunto debe tomarse por ejercicio, y cómo debe llevarse a cabo~ Dado que quillbet homo in se ·setztit certam et proe– ll