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-101- sivas a las Comunidades, "el amar mucho sus ejercicios espirituales, el tratarse con blandura, y desear la salud y la vida con exceso. Todo esto nace del. amor propio, y otras muchas cosas perniciosas al alma, de las cuales hace una categoría S. Pablo, diciendo:» serán los hombres amadores de si mismos. «Erunt ha– mines se ipsos amantes; y luego sigue:>> co– diciosos, arrogantes, soberbios. El remedio para tantos males es, aborrecer– se a sí mismo. Si el hombre, dice S. Agustín se pierde amándose, ciertamente se halla ne– gándose. Negándose, pues, como está dicho, a to.dos los gustos de los sentidos y refrenando los apetitos desordenados de las potencias, va– ciando el corazón de todo amor a las criaturas y singularmente de sí mismo, no haciendo ni de– seando cosa alguna, por buena que sea, sin le· vantar primero el corazón a Dios y conocer que no lo hace por propio gusto o conveniencia, sino solo por voluntad y agrado de Dios. Mu– riendo de esta suerte el hombre a los sentidos y potencias y singularmente a .si propio, vivi– .rá para Dios, y abundará en virtudes; pero si del todo no se mortificare no hará mucho pro– greso en la perfección; así lo dijo Gristo

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