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- 276 Ffo1lmente helor& podido apreciar el lector ccimo en es- te modo de argumentar se repiten los motivos ya suficientemen- te estudiados anteriormente El argumento de la "felicidad" no hace mAe que proponer unidos los argumentos ya explicados del amor de caridad y del sumo bien: el sumo bien es el objeto de la felicidad y el amor de caridad expresa la actitud y activi- dad que se exige en el sujeto para lograr la felicidad. Pues 146- Jo ambos aspectos la "felicidad" divina exige la Trinidad de personas.Por otra . parte el mismo Sco Pr. identifica el argu - mento de la felicidad con el del amor caritativo, al decir que lu felicidad exige un amado y un coamaMo, para ser cumplida y perfecta (137) . Todavia hay dice S. Buenaventura - algunos argumen- tos de"congruencia" tomados de la suficiencia de las combinacio- nes ternarias y de la perfección de número tres. Estas combina- ciones propuestas por nuestro Autor , de un amor divino gratuito, debido y mezcla do ambos: le una persona que da,otra que recibe y otra que da y recibe etc., no pueden tener alcance verdadera- nte probativo. Lo MiHMO se diga del "tres" considerado clamo adinero perfecto; son dnicamente razone3 cmgvaa5" (138). En otro sentido pudieran tener, sin embargo, mfis importancia: en cuanto nos manifiestan el modo de pensar Me S Buenaventura co- 137. " Suma beatitud() exigit dilectionem et condilectionem I S.,d. 2, a. unic., q., resp.; I s 57a 136. " Ratio congruitatis summitur ex sufficientia combinatio- num at ex perfectione numen/ ternarii". Ibd.:I,57b. Cfr.Hex. 11 n.12; V, 382a