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129 La afir o u de la capacidad de la razón natural para olonoiner por si misma la Trinidad es bien explioita y se repite constantemente : "por sus obras visibles se da a conocer la misma Trinidad y mediante sus efectos dejó im- preso el conocimiento de sí mismo el Sumo Artífice" (62). Abelardo expone de un modo siotembico y con abunda(Itee testimonios de los Jdaadres su convicoión sobre los al canoes de la razón en esta materia. ?ara atraer a la fe tanto a los judíos como a los paganos, se propone aducir testimonios de judíos y paganos avaros del misterio de la Trinidad. Siguiendo este criterio le es fácil encon - trai' la dootrina de la generacan del Verbo en 1s teo- rías de los diversos filósofos sobre el Logos. 3:1 la doc- trina platónica sobre el AOUS y el Ålrua del mundo descubre la Jabiduria eterna y la virtud vivificante del 'tlepfritu. (63) La usouridad con que, naturalmente, habían de ex - presar los paganos estas realidades divinas, no es una objeoidn insuoerable para admitir que realmente hablaron de ellas, ni desvirttia el valor real de sus investigacio- nas en lo da ntal lo mismo que no reousamos el testi monio de los aunque su terminologia no llegue a ser 32. In p.ad Bom. ; i.l78,8O3 7 006-103 • - iptiang b. 1 178 9 es.
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