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50 Sobre el valor de cfr. Penido pe a no valor de conveniencia y we oa ovan1ensee , psicologics tie- da probabilidad auan- cambio verifioado en otros ~toa fundamentales de la doo- trina trinitaria (48 ). Juzgando 41 miemo el aleamos proba, tivo de la teoria psioolhioa utilizada ice que no prue - ba en modo alguno la existencia de la Triaidad ea Dion. Las creaturae y al alma imagen no sou efectos do la Trinidad de persoaas en ouaato tale zLo de la naturaleza comdn y por ello 6610 :a02 pueden llevar a con oor la naturaleza común. De todas los razonamientos que so aseen para pro- bar la existencia del misterio el mis aoeptable es el que se toma de la eneJanza de nuestra inteligeacia oon la di- vina ; pero aun este no prueba suficientoAente cosa algu - na acerca de Dios, por eso da quo al euteudiaaento humano no se encuentra univocamente en DiO3 y en nosotros (49). No son argumentos de valor positivo, sino dnicamente negam- tivo : valen en cuanto resuelven todas las objeciones que pudiera hacernos el adversario y a través de negaciones nos ayudan a ver algo de lo que Dios gAL an si mismo (50 Sum• I I,32 1 1; De Ter q.10, 451 um. 1,32,a. do se trata de probar la ' exist anate' "del misterio, pero puede dar verdadera guill& teológioa cuan- do se trata de explicar la ~mol l a. Sn este misma senti- do ofr. Cuervo, en la Introduoción a la oixesti6n 32 de la 3u ed B.A.0., Atdrid, 1V48 tomAIla.222 85.