BCCCAP00000000000000000000225

nos obliga a preguntarnos ahora, en orden a una mayor compren sión, si la consciente afirmación simultánea de ínmanencia y tras cendencia divinas, tal como ha sido examinada, es algo meramen te casual o, más bien, lleva implícita una metafísica de la trascen dencia divina, con su carácter de exigencia de inmanencia en las creatu ras. En la primera parte de nuestro estudio, nos preguntábamos por la motivación última de dicho pensamiento desde su concep ción metafísica plenamente reductiva. Mediante un procedimiento parecido tratamos ahora de hacer aflorar su pensamiento sobre la inmanencia de Dios desde su con cepción de la trascendencia; desde cuya perspectiva nos ha pare cido ver afirmada e interpretada aquélla. Este modo de proceder, al mismo tiempo que nos puede pa tentizar las relaciones existentes entre inmanencia y trascendencia divinas, puede ofrecer, asimismo, la verdadera dimensión en la que aparece la inmanencia de Dios y el significado que ésta adquiere dentro de la concepción matafísica plenamente reductiva del Doc tor Seráfico. Según esto, nos preguntamos: ¿cuáles son los indicios que nos han hecho sospechar en la existencia de una implícita concep ción metafísica de la trascendencia divina en su pensamiento so bre la inmanencia de Dios en las creaturas? Basta reflexionar de nuevo sobre el análisis realizado en tor no a la justificación bonaventuriana de la inmanencia divina, para apreciar la íntima relación existente entre los motivos allí apunta dos y cuanto hemos descubierto sobre la concepción de la trascen dencia divina. Efectivamente, decíamos que la trascendencia divina venía definida mediante un sistema de coordenadas fundamentales: ple na autosuficiencia e independencia del ens nobi!issimum frente a cualquier otro ser, por una parte, y radical dependencia dinámi ca de éste respecto de Dios, por otra. Y ambas, interpretadas des te la triple causalidad eficiente, ejemplar y final. Ahora bien, si nos fijamos en las razones que 5. Buenaventura indica como prueba de su afirmación de la inmanencia divina, ob servaremos inmediatamente unas líneas simétricas muy similares y, 241

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz