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78 rosro CASTILLO CABALLERO mo y, en especial, las causas del ateísmo moderno. Su trabajo es anali tico-crítico. Aunque, en ocasiones, se aprecia una falta de perspectiva histórica en su interpretación 63 64. R. VERNEAuX, Ateísmo materialista y existencialista. Reconociendo la dificultad inicial que el tema supone, el a. ciñe su estudio a «escrutar los textos y evaluar las doctrinas» (p. 8). En con secuencia con este objetivo, pondría por título, si no fuera tan largo y pesado, el siguiente: «Observaciones sobre las formulaciones doctrina les del ateísmo contemporáneo» (8). Teniendo en cuenta el ambiente intelectual francés al que se dirige con preferencia, es natural que re duzca su estudio a dos corrientes fundamentales: materialismo dialéc tico y existencialismo. Divide su libro en tres capítulos y una conclu sión. Primero: La repulsa de la metafísiça. Segundo: El ateísmo mate rialista. Tercero: El ateísmo existencialista. En la conclusión procura dilucidar algunas cuestiones, como el postulado positivista, fe y prue bas, religión y alienación, etc. La tesis que pretende defender a lo largo de toda su exposición es la de que «el ateísmo actual no es tanto la ne gación de Dios como repulsa de creer en él» (p. 11). Desde el punto de vista histórico, el ateísmo actual es la «descomposición del hegelia nismo, descomposición cuyo fermento es una exigencia de humanismo» (p. 141). Una vez expuestas las motivaciones de este atefsmo, Verneaux emprende una oportuna crítica del mismo. Sin ánimo de mayores pro fund;zac;ones, recuerda y aplica las doctrinas principales del crist;anis mo señcíllamente. El ateísmo contemporáneo se sitúa, según él, en la línea de las «opciones», tema que queda satisfactoriamente aclarado en el libro . b. TEMÁTIcA HISTÓRICA 65. H. ARv0N, Breve historia del ateísmo. El a. divide su libro en dos partes. Estudia, primeramente, la etapa materialista del ateísmo: el estudio de la Naturaleza lo favorece. En la segunda parte lo examina bajo el punto de mira humanista: el estudio del hombre y sus exigencias favorece otra faceta del ateísmo positivo que caracteriza el ateísmo contemporáneo:. su aspecto soteriológico. La traducción castellana nos presenta, muy oportunamente, un Apéndice, 63. Ci. TRESMONTANT, Les prob1mes de t’athéisme, París, Éd. du SeulI, 1972. 64. R. Vrjiiux, Leçons sur l’athéisme contemparain, París, Téqui, 1964.