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sba. Según explican los ancianos, antes no había agua. El río Ihkí fue hecho para bien de los barí. Para que puedan beber agua. Según los Saimadoyi —barí antiguos—, el personaje Kariká subió a la mon taña en busca de agua. Daba fuertes machetazos y no encontraba nada. Así nos dice la tradición sobre Kariká. Bajó de la montaña, hizo un hueco profundo en un árbol y, por fin, de esos árboles gran des, brotó el agua. Así encontró el agua. Rápidamente comenzó a dar machetazos hacia ese lado; oyendo cada vez más como ruido de corriente de agua. Kariká descansó unos cuantos días para que su trabajo no le cansase demasiado. Pero, al siguiente día, prosiguió su trabajo. Abrió un poquito y salió el agua. Cada vez hacía más pro fundo el boquete, hasta que salió un chorrito de agua. Los barí que estaban observando a ver qué pasaba, se emocionaron al ver surgir el agua. De uno de los troncos salieron corrientes de agua. Los pri meros que tenían sed bebieron rápidamente. Kariká les observaba a ellos. Volvió a hacerlo más profundo y salió más fuerte la corriente de agua. Así nos cuenta la historia de Kariká, de cómo surgieron los ríos, mares y otros caños. Donde quedaron un poco las ramas partidas, allí se encharcó el agua y, luego, se transformó en lagunas. Donde no se rompieron las ramas, surgieron los ríos, se formaron los ríos y en su centro quedó para siempre el agua. El río Ihkí fue uno de los que nacieron de una rama grande. Antes, no existía agua ni ríos. El Ihkí salió del centro de una rama grande. Donde se unieron todos los ríos en el río Ihkí, así nos lo explican los antiguos, no pudieron pasar los barí, porque estaba muy profundo. Así lo contaba Kariká. Cada vez que hacía tumbar un árbol de esta clase, quedaban como olas en movi miento. Así nos cuentan los antiguos. Otro personaje anciano, Andañú, lo explicaba para todos, para que de esta forma los barí pudieran comprender la historia antigua sobre el origen del agua. El Dág’da fue una de las ramas que se quedó cerca de Yéra —montaña—, en la cabecera de esta montaña. Ihkí fue un río largo que atravesó Co lombia. De ese río era la rama grande. Y así nacieron todos los ca ños por todos los sitios. Andañú así nos explicó cómo nacieron todos los ríos para nuestro bien. Esos personajes nos explicaron que, en algunos ‘de esos ríos, la base del agua era tan profunda, que la vista de los barí no alcanzaría el término de su superficie. Era el mar. Los viejos así lo explicaban. De las ramas pequeñas siguieron salien do los ríos pequeños. Así nos lo cuentan y nos lo dicen los ancianos. Y cómo los barí no alcanzaban a llegar con su vista el otro lado de algunos. Kariká hizo los ríos, el mar, los caños por encargo de Sabasiba. Y así nos lo explicaban los ancianos antiguos. Kariká siguió haciendo sus viajes a la orilla del río; pero no podía parar al otro lado. Era muy profundo el río. Kariká se dijo a sí mismo: «De manera que yo he hecho los ríos.., y ahora parece que no puedo pasar al otro lado». El fue en busca de agua, para sacarla de esos árboles grandes. Pues él tenía mucha sed. Hasta que encontró el agua para beber. 338