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MISION DE LOS CAPUCHINOS EN GUAYANA 65 pera mandó a V.S., a fin de que V.S. me los entregase, -hay puntos fun– dados en falso, otros impracticables, y otros que se practicarán a su tiem– po-, resolvimos representar al Rmo. P. Comisario general, como se hi– zo en fecha de 2 de enero, lo muy mal que lo habían informado algún in– dividuo o individuos de esta Rvda. Comunidad en muchos particulares asuntos". Estas son, señor, las expresiones copiadas a la letra de la respuesta del P. Prefecto y las con que ha obedecido los juiciosos, muy arreglados y acertados preceptos de su Prelado, sobre los que prescindiendo de los puntos que tratan a las funciones intra claustra, que no son de mi ins– pección, y ciñéndose únicamente a unos pocos que comprenden en parte el origen de los motivos de las desavenencias, expondré a V.M. cuanto alcanzo y me ha hecho conocer la práctica experiencia de los sucesos acae– cidos entre estos religiosos. Les ordena su Comisario general que, para evitar enteramente las sospechas del trato con el holandés, se saque el ganado vacuno de Tu– meremo y se una al hato grande para su mejor conservación, poniendo to– radas en siete u ocho misiones que nombra, para de ellas proveer de car– nes a las demás, y en las villas de Upata, Barcoloneta y para dar los au– xilios necesarios en los casos que se ofrezcan de alguna real expedición o servicio de V.M., que ningún misionero envíe indios fuera del terri– torio de las misiones y menos a Esquivo sin permiso de los PP. Prefec– to y Conjueces y el del gobernador de la provincia: que cuando se haga Capítulo trienal lleve cada religioso una carta por duplicado, jurada y firmada, de lo que tenga que celar en orden a las misiones , indios, Regla seráfica y Constituciones, para que se remitan al Comisario general, quien, sin estos requisitos, no confirmará la elección que se hiciere. En cuanto a la fundación de Tumeremo les tenía ya hechos mis re– paros a los RR. PP. Prefecto y Conjueces, manifestándoles graves obs– táculos que se presentan para realizar por ahora su ejecución y de cuales– quiera otra que sea aproximada a la colonia de Esquivo, hasta cerrar y ase– gurar la avenida del río Cuyuní de un modo que impidiese la deserción y trato de los indios poblados con los holandeses, y las sospechosas internaciones clandestinas de éstos en nuestras posesiones, al comercio re– probado de los naturales que esclavizan y de otros frutos de la tierra, que lo hacen, sin que nadie los pueda embarazar por no haber resguardo en aquel río ni población de españoles en mucha distancia, que les con– tenga, como por la vía reservada del ministerio representé a V.M. en los papeles y planos que dirigí con oficios de 10 de julio de 1788 y 22 de