BCCCAP00000000000000000000221

MISION DE LOS CAPUCHINOS EN GUAYANA 299 guense allí los puntos decretados que aquí por brevedad se omiten, y del de una real orden de Vuestra Majestad de dos de julio de mil ocho– cientos catorce, comunicada al Rvdo. Obispo electo de Guayana por vuestro Secretario de Estado del despacho universal de Indias, que di– ce: "El Rey se ha servido enterarse de una exposición que, a nombre de Vuestra Señoría, ha hecho D. José de Olazarra con fecha de vein– tinueve de mayo último, solicitando que, en consideración a la falta de cumplimiento de las leyes y diferentes reales cédulas, que se observa en esa provincia, en cuanto a la reducción de indios y secularización de las doctrinas que están a cargo de los Padres Religiosos Descalzos y Ca– puchinos catalanes, se dignase Su Majestad confirmar con respecto a esa misma provincia el decreto que, con presencia de varios recursos de Vuestra Señoría y con el fin de remediar tales abusos, dieron las Cor– tes en trece de septiembre del año próximo anterior, y en su conse– cuencia ha tenido a bien Su Majestad acceder a la expresada solicitud, mandando que en el distrito de esa diócesis tenga cumplida y puntual ejecución cuanto en el referido decreto se previene, por el mejor servi– cio de las misiones y beneficio de los indios". Y, habiendo contestado esta vuestra Comunidad a los referidos señores Gobernador y Obispo electo con el más rendido obedecimien– to y respeto debido a vuestra real orden y considerado con la más pro– funda meditación los particulares asuntos del citado decreto, se halló en la precisa necesidad de informarles y exponerles los graves perjuicios que de su ejecución resultarían no sólo contra esta vuestra religiosa Comunidad, reducciones e indios de su cargo, sino también en contra del bien público y universal, así temporal como espiritual de la provin– cia y a consecuencia de esto, recurriendo a la protección de vuestro Go– bernador Vice-Patrono regio, les ha suplicado la suspensión de la ejecu– ción de los particulares contenidos en los seis puntos del citado decreto, hasta tant o que, elevado este recurso y exposición al conocimiento de Vuestra Majestad , mejor informado de los supuestos motivos y fines por los cuales las Cortes expidieron el citado decreto y del verdadero estado y circunstancias de estas vuestras reducciones de nuestro car– go y de esta provincia de Guayana y su diócesis, pueda dignarse resol– ver lo más conveniente. Y, por cuanto los motivos que D. José de Olazarra expuso a las Cortes de Cádiz a nombre del Rvdo. Obispo de Guayana para alcan– zar el referido decreto, según en éste se expresan, fueron solamente los supuestos "males que en lo moral y en lo político, -dijo-, afligen a