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166 FUENTES PARA LA HISTORIA COLONIAL DE VENEZUELA 290 Cédula a la Audiencia de Caracas sobre el pago de los sínodos a los mi– sioneros de Guayana y otros puntos relativos al gobierno de la misión (San Ildefonso, 7 septiembre 1797). - Original El Rey. (Archivo General de la Nación, Caracas, Cédulas rea– les, VI , ff. 335-41). Presidente, Regente y Oidores de mi Real Audiencia de Caracas: Con motivo de las desavenencias ocurridas entre el Intendente que fue de esa Audiencia, D. Juan Guillelmi, y Fray Manuel de Preixana, Pro– curador de las misiones de Capuchinos catalanes en la provincia de Guayana sobre no haberse podido pagar los sínodos que éste solicitó y tenían consignados en mis cajas reales por falta de caudales y no ne– cesitar aquellas misiones de semejante auxilio por tener con los hatos de ganado que proveían lo suficiente para su subsistencia, se mandó al mismo Intendente por real cédula de 24 de junio de setecientos noven– ta y dos informase con justificación sobre el referido particular de los hatos de ganado que tenían los misioneros, pero como hubiese duplicado su anterior representación por los dos ministerios de Gracia y Justicia y de Hacienda de Indias, se expidió por éste a su sucesor D. Esteban Fer– nández de León real orden en 23 de mayo de 1791, para que, tomando las correspondientes noticias del Gobernador y ministros de Guayana y demás personas que tuviese por conveniente, informase del uso que hacían de sus ganados dichos misioneros, si los empleaban en manu– tención de los indios o hacían granjerías con ellos; qué utilidades les quedaban en este caso y si tenían necesidad de los sínodos que les es– taban señalados por las cajas reales; de qué medios se habían valido para su subsistencia en los años que no se les habían pagado; qué in– convenientes resultarían de no satisfacerles este débito y cuáles de cor– tar los sínodos enteramente, con otras prevenciones. A su consecuencia expuso en carta de 22 de junio del siguiente año de 1792 el enunciado Int endente con referencia a varios informes que pidió, que las misiones de Guayana tienen treinta pueblos y en ca– da uno un religioso: que todos vivían de comunidad y bajo las reglas eco– nómicas de la que llaman Procura, situada en el pueblo de Caroní, bajo la dirección del Prefecto , dos Conjueces y un Procurad or que entre los misioneros se nombra en Capítulo cada tres años, a más del síndico

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