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5ó FUENTES PARA LA HISTORIA COLONIAL DE VENEZUELA los otros seguir y estar conforme a las reglas militares, así en las mar– chas como en la residencia de los pueblos, para cuyo fin se nombrará de cabo el soldado más antiguo o que mejores luces tenga del servicio, con– ducta y valor, prefiriendo siempre para el mando la distinción del hombre blanco al que es de color. 4'? - Al que fuere de cabo le hará entender las obligaciones del puesto de cuanto se va a entregar, cómo ha de vivir él y los que hubie– re debajo de su orden, sin escandalizar con sus operaciones a los indios, antes sí darles buen ejemplo, haciéndose respetar de ellos con tan buena conducta, que sin hacerles agravio ni extorsión alguna, milite siempre la razón con la fuerza, sin propasarse a castigos de indios, sin que ente– ramente sean resueltos y acordados por el P . Presidente del pueblo, respecto qué nuevas reducciones debe dicho P. Presidente estar impues– to en el modo suave, prudente, con que deben ser tratados los indios recientemente poblados y sólo en los casos de sublevación o incendio pro– cedido de malicia, podrá dicho cabo apreender y pensionar en el cepo a los delicincentes y, si en los mismos casos sucediere usar los indios de armas, deberá hacerles frente, a fin de ponerlos en quietud y, si nece– sario fuera, porque el caso venga tan estrecho que forzosamente pida para su remedio el escarmiento, lo podrá ejecutar, pero siempre con tanta prudencia que sobrepuje la benignidad al escarmiento . 5'? - Será inteligenciado el cabo que custodiare cualquiera misión de puesto siempre y cuando que le sea comunicado por el P. Presiden– te alguna sospecha o preparativo de evidente peligro, el despachar pron– to aviso con un indio montado al cabo principal, que para éste y los de– más casos deberá residir en la expresada misión de Santa María, expre– sándole por escrito con individualidad los recelos, movimientos o apara– tos que se hubieren reconocido, así de traición como de otra maldad que quieran ejecutar, para que, en vista de este recurso, dé el pronto auxilio que baste a la contención de tales hechos, ya sea con uno o más hombres, o bien, si el cabo pidiere, acompañados con su propia perso– na, de modo que el primero y principal objeto de establecer el cuerpo de guardia, que por ahora deberá permanecer en Santa María con tres hombres, es y será la mira y atención a que dentro de dichas misiones tengan los pueblos más avanzados y fronterizos al gentilismo enemigo, el auxilio y socorro que necesiten, sin las dilatorias de haberlo de solicitar a esta plaza, a menos que no sea en el caso de la mayor gravedad, como el levantamiento de uno o más pueblos o amenaza de evidente ruina de los enemigos, pues éste entonces estará obligado el cabo principal a