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.344 FUENTES PARA LA HISTORIA COLONIAL DE VENEZUELA legalmente sacada, de que doy fe en esta misión de la Purísima Concep– ción de Caroní, hoy día 14 de agosto del año mil setecientos ochenta y cuatro. Fray Buenaventura de Sabadell, Notario Apostólico ( firma y rú– brica). 232 Informe del P. Félix de Tárraga, dirigido al P. Prefecto de la misión, re– lativo al proceder del Comandante Centu rión y de los corregidores y ad- ministrador puestos por él (Caroní, 8 julio 1779). - Copia M.R.P. Prefecto. (STRICKLAND, o. c., 39-41; Archivo de la Corona de Aragón, Barcelona, Fondos monacales. - Universidad, legajo 56, tomo 2?). Cumpliendo con el precepto de V.C.M.R. obedezco con decir que he visto la real cédula, fecha en San Ildefonso, a 26 de julio de 1777, despachada a instancias de D. Manuel Centurión, y, en atención de lo prevenido por V.C.M.R ., digo que, sin embargo que para formar el in– ventario para dar las cuentas en nuestro Capítulo que se celebró el año pasado de 78, tenía bien registrado los autos que se firmaron para la entrega que hizo el Sr. Administrador D. Lorenzo Castellanos, a fin de ver todo lo que yo había recibido en todo el tiempo que estuvo la procu– ra en poder de dicho D. Lorenzo, y después lo que a mí me entregó cuan– do el rey nuestro señor se dignó mandar que se volviesen las cosas como estaban antes. No obstante, a vista de lo que ahora me manda V.C.M.R., de nuevo he revisto los dichos autos y los que se hicieron cuando la Rvda. Comunidad lo entregó todo en poder y dirección del nominado Castella– nos y confrontados los inventarios sobre la existencia de los que yo en– tregué como Procurador de la Rvda. Comunidad al dicho Sr. Administra– dor, y lo que éste me devolvió a entregar, habiendo cotejado lo uno con lo otro, hallo que con todo lo que dio dicho Sr. Administrador a los Padres misioneros para las iglesias y lo que me entregó en todo el tiem– po que tuvo el manejo, y, finalmente, con lo que contenía el inventario de la última entrega, encuentro que disminuyó el inventario, que se hizo cargo al Sr. Administrador la Comunidad, de cinco mil doscientos trein– ta y nueve pesos, tres y medio reales, porque lo que yo le entregué de existencia, según el inventario de que se hizo cargo el dicho Adminis-