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328 FUENTES PARA LA HISTORIA COLONIAL DE VENEZUELA tas viene llevar a vender poitos a Esquivo y, cuando les conviene, se saben unir. También soy testigo de esta verdad porque , antes de levantarse los indios de los tres pueblos que he nombrado, convidaron los caribes a los guaicas para que asistiesen en su levantamiento, y, siendo así que eran enemigos declarados entre sí, asistieron muchos guaicas, y, en el mismo día del levantamiento, rompieron las amistades sobre el repartimiento de las cosas hurtadas y tuvieron gran pelea de macanazos y flechazos unos con otros. Es público que en el río Cavallapi tuvimos un pueblo formal de guaicas y otro de la misma nación en la sabana de Avechica, y que to– dos los pueblos se han perdido por no poder sujetar los indios , porque es imposible impedirles volver al monte y a sus tierras, de donde han sa– lido, con el motivo de ir a buscar sus parientes u otros motivos que se fingen , y hacen mil picardías, o matando gente o ir a Esquivo a beber aguardiente o no volver más. Y si no se les da licencia de ir, ellos se van escondidamente y pocos vuelven, y así se van acabando sus pueblos , o bien anochecen y no amanecen, como hicieron los de Avechica, y todo de como están criados a la libertina, y andariegan a los holandeses por te– ner en ellos y en sus tierras el refugio, les abonan también sus malas cos– tumbres; y, como ven que, estando poblados, es necesario dejar estas ma– ñas por no quererse sujetar, se van y se pierden los pueblos. Lo mismo se ha de decir de aquellas otras naciones aliadas y amigas de los extran– jeros, y, si no fuesen tan imediatos, tal vez se mantendrían sujetos, co– mo los del alto Orinoco y Río Negro. Me olvidaba de decir que me dicen los indios que de Tupuquén a Esquivo en donde el gobernador, unos dicen que hay seis días de nave– gación, otros dicen ocho, y me acuerdo que los caribes que nos acom– pañaron a las sabanas del Parime, nos decían que podíamos haber ido más descansados y más presto a la Parime por el Cuyuní, Esquivo, Apo– noni, Avarauru y luego estábamos a la Parime. Antes de salir D. Vicente con su gente referí esta noticia al Sr. Comandante general D . Manuel Centurión y me respondió: que no se podía ir por esa parte por no pasar por las tierras de los holandese s. Quedo para servir a Vuestra Paternidad Muy Reverenda su más inútil súbdito y servidor, Fray Benito de La Garriga. M.R.P. Prefecto Fray Mariano de Sabadell. Habiendo examinado que la causa de no haberse reedificado las 14 misiones destruidas en esa provincia a cargo de los RR. PP. Capuchinos catalanes y de no haberse impedido esta ruinez ha consistido en la falta

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