BCCCAP00000000000000000000220

302 FUENT ES PARA LA HIS TORIA COLON IAL DE VENE ZUELA Besa la mano de V.C.R. su más afecto seguro servidor y hermano, Fray Félix de Tárraga (firma y rúbrica) 220 Los misioneros de Guayana ofrecen generosamente al rey diez mil a doce mil cabezas de ganado vacuno para que él disponga de ellas a su voluntad (Caroní, 14 abril 1777). - Copia (AGI, Caracas, 393) . Señor. Habiendo pasado con vuestra real orden y permiso el año 1724 a esta provincia de Guayana en el Orinoco vuestros vasallos y súbditos los Padres misioneros capuchinos catalanes a fin de (ocuparse) de la reduc– ción de los indios y extensión e incremento de dicha provincia a vuestra real corona, viendo los primeros Padres misioneros que el medio más eficaz para la conservación de uno y otro era el procurar que hubiese en la tierra con que se pudiesen mantener y subsistir , lo que no se había po– dido conseguir hasta aquel entonces, resolvieron el que se hicieran dili– gencias a ver si podían introducir algún poco de ganado vacuno, el que se consiguió pasando a la provinci a de Cumaná person almente el primer R.P. Prefecto con algunos indios, pasando el Orinoco y gastando 28 días de camino por tierras incógnitas en aquellos tiempos, expuestos cuasi a perecer. Al cabo de los mencionados días dieron milagrosamente en uno de los hatos de la citada provincia de Cumaná, en la que practicaron las diligencias y pudieron conseguir la conducción de hast a setenta reses cu– yas dieron principio al hato actual y permanente , que con vuestro real permiso se estableció en esta provincia, y con la buen a conducta y eco– nomía de nuestros antecesores se ha ido multiplicando en tanta mane– ra, que ha sido suficiente para abastecer las misiones y socorrer la pro– vincia como siempre se ha hecho. Y considerando ser más el multiplico ( ! ) que siempre ha tenido , que no el consumo, confesando en esto ha– ber obrado el poder divino más que nuestra insuficiencia, nos conside– ramos al presente con un gran número de ganado y con pocas fuerzas para poderlo cuidar a falt a de caballos, por lo que hemos resuelto pre– sentarlo a V.M. para que se digne disponer a su real beneplácito de diez o doce mil reses, por haber proyectado de que con las restantes tendre-

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz